Los PGE contemplan unas subvenciones a la movilidad sostenible de 66,6 millones de euros, lo que supone una dotación de 50 millones de euros para el Instituto de la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDEA).

De momento no habrá novedades en el Plan de Ayudas, con 16,6 millones para la adquisición de vehículos ecológicos y 15 millones de euros para el programa de infraestructuras, como la implantación de puntos de recarga rápida.

De lo que no cabe ninguna duda es que el nuevo Gobierno socialista no mantendrá la ayudas a la adquisición de vehículos nuevos con mecánicas convencionales, ya sean estas de gasolina o diésel. El Plan PIVE desaparece por completo para destinar esos fondos a los vehículos eléctricos, los de hidrógeno o los movidos por gas (GLC, GNC). Un nuevo Plan MOVEA del que podremos ofrecer más información en próximos meses.

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