La fabricación de los scooter se realizará en la planta de Bajaj en la ciudad india de Pune, aunque se comercializarán bajo el paraguas de ambas marcas. KTM ha destinado un presupuesto de 500 millones de euros a investigaciones relacionadas con la movilidad eléctrica, centrándose en los conceptos futuros de la movilidad urbana, nuevos materiales para aligerar el peso de sus modelos y tecnologías inteligentes de gestión de la movilidad en las ciudades (C-ITS).

El acuerdo responde a la llamada a la electrificación del parque de motos indio en un plazo máximo de ocho años. El Gobierno indio quiere tomar la delantera en la nueva tecnología eléctrica aplicada a las motos, pues se lamentan de haber perdieron la oportunidad de hacer lo mismo con el sector del automóvil.

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