Así lo ha asegurado el consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro,  en el Pleno de las Cortes, tras la constatación del incremento del número de accidentes mortales y fallecidos en las carreteras aragonesas. En el último año los accidentes mortales han pasado de 46 a 55 y los fallecidos de 50 a 57. Un tercio de los cuales se ha producido en carreteras secundarias de su competencia.

El 2% de las carreteras aragonesas concentran el 20% de las víctimas

Los datos que maneja el Gobierno de Aragón proceden de los estudios aportados por la Asociación Mutua Motera (AMM), en los que se identifican 400 km de tramos peligroso y 33 puntos negros achacables a la falta de mantenimiento de la calzada.

Siendo tramos de pequeña longitud bastaría con inversiones modestas para acabar con su peligrosidad. Los cambios del firme, señalización, protección para motoristas (SPM) y márgenes, en 26 tramos analizados, tan solo supondría una inversión de 350.000 euros (menos de 14.000 euros por tramo).

La tramitación de las obras para 2018 se ha presupuestado 43 millones de euros, muchos de los cuales están en fase de adjudicación.

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