Unas 15.000 motos han sido controladas, de las que más de 100.000 circulaban por carreteras convencionales, interceptando 393 motoristas que circulaban incumpliendo la normativa de tráfico y seguridad vial; mientras que en las vías rápidas han sido controlados 4.266 motoristas, de los que 84 fueron denunciados.

El exceso de velocidad ha sido la infracción más cometida, con 127 motoristas cazados por exceso de velocidad y 8 por no llevar el casco puesto.

Los agentes han realizado numerosos controles de alcohol y drogas, con el resultado de 22 conductors que dieron positivo en pruebas de alcohol y 14 en los test de drogas.

Otros motivos de denuncia fueron circular con la ITV caducada, desfavorable o negativa ha sido el motivo de 47 denuncias y otras 14 por carecer del seguro obligatorio.

La DGT recuerda que el 24% de todos los accidentes con víctimas ha sido de motoristas. Esto quiere decir que en los 25.944 accidentes de motoristas registrados, 343 han sido motoristas fallecidos. En las vías urbanas murieron 27 motoristas más que en 2015, mientas que en vías interurbanas se redujo en un 5%.

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