Los 5 millones de vehículos de dos ruedas a motor que existen en España permiten ahorrar cada año 9,8 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera. Un problema que afecta al cambio climático y que agrava los efectos de la `isla de calor´ en las grandes urbes.
Al igual que el tabaco los vehículos con motor de combustión son dañinos para las vías respiratorias. Para el caso de las motos que representan el 15,7% del parque móvil, tan solo son responsables del 3,5% del total de emisiones de CO2 y del 0,3% de las de NO2 (que provoca inflamación de las vías aéreas en personas y animales), mientras que las partículas más problemáticas para los problemas respiratorios de tipo alérgico y asmático (PM10) representan el 6,6% del total.
Una reducción de emisiones que se ve acompañada por una menor pérdida de tiempo en los trayectos urbanos (se estima en un 50-70% menos) y en la mejora de la fluidez del tráfico en las ciudades: la sustitución del 10% del parque supondría una reducción del 40% de los atascos.
El secretario general de ANESDOR, José María Riaño, ha señalado que “desde la asociación tenemos un firme compromiso con el medio ambiente y la consecución de una movilidad más sostenible”. En ese sentido, Riaño ha indicado que “buscamos promover el uso de la motocicleta como solución a algunos de los retos más inmediatos a los que se enfrentan las ciudades como la contaminación o los atascos”.
Por todo ello se invita a los 438 ayuntamiento que cuentan con actividades relativas a la Semana Europea de la Movilidad a que favorezcan las políticas pro-moto recogidas en un plan de movilidad urbana, con más plazas de aparcamiento específicas, mejora de la seguridad vial (SPM, pintura antideslizante), zonas adelantadas en los semáforos, carriles moto en las grandes arterias de la ciudad, y convivencia de la moto en los carriles Bus-Taxi que así lo permitan.
Fuente: ANESDOR
