Los 47,6 CV de potencia a 7.100 rpm y un par máximo de 52 Nm desde 4.000 rpm no deben importar en demasía a quién opta por una trail de estilo clásico. El bicilíndrico de 648 cc luce formas vintage, pero su culata de 8 válvulas y cambio de 6 velocidades (5 V en el modelo de 400 cc) son de lo más actual.
No así la refrigeración aire-aceite, que acentúa el aspecto retro de la mecánica, que no está diseñada para destacar por potencia, sino para un uso optimizado en el medio-bajo régimen.
Las prestaciones son suficientes para mover con agilidad un modelo 200 kg, que no son excesivos para un uso puramente off-road. En el apartado de suspensiones y frenos puede seguir un esquema muy semejante al actual, con un disco delantero de 320 mm y uno trasero de 240 mm y ABS de Bosch.
Una de sus señas de identidad serán los guardapolvos de las suspensiones y el pequeño guardabarros supletorio que protege el faro del barro.
Pocos cambios y para mejor, esperemos que el precio tampoco sufra muchos cambios y no supere por mucho los 4.400 euros del modelo de 400cc.
Fuente
Imagen: Recreación del aspecto que podría tener la Himalayan de 650 cc.