En la última década, la ciudad de Madrid, por ejemplo, ha tomado medidas para contrarrestar la contaminación al reducir los límites de velocidad en las carreteras de acceso a la capital. Madrid también introdujo las zonas conocidas como APR (Áreas de Prioridad Residencial), áreas donde no se permite conducir a los no residentes.

Hasta ahora, las motocicletas han estado exentas de cualquier restricción, pero cambiará el próximo 30 de noviembre de 2018. En esa fecha, las APR existentes se ampliarán y se unirán en una gran APR, denominada `Madrid Central´. Esta área de exclusión cubrirá prácticamente todo el centro de Madrid.

Los residentes pueden acceder al área en sus vehículos pero solo para estacionar en su propio vecindario. Los no residentes cuyos vehículos posean las etiquetas energéticas CERO y ECO también pueden acceder libremente al área. Y aquellos con etiquetas energéticas B o C solo pueden acceder para estacionarse en un estacionamiento público o privado, no en la calle.

AMM formará parte de la protesta el domingo 2 de diciembre en Barcelona. La protesta está organizada por AMC (Asociación de Motera de Cataluña) junto con otras organizaciones.

Los niveles de clasificación para motocicletas:

- Cero: eléctrico con un rango de 40 km o más.

- ECO: eléctrico con un rango de menos de 40 km.

- C: combustión interna, regulación Euro 3 o Euro 4.

- B: combustión interna, regulación Euro 2.

- Sin clasificación: no cumplen ninguna de las condiciones anteriores.

Para los motociclistas, la nueva regulación del Ayuntamiento de Madrid prohibirán el acceso al centro de la ciudad con motocicletas matriculadas antes de 2003 (el 38,79% de las motocicletas en Madrid están registradas antes del 1 de julio de 2003 y no tienen clasificación). Sólo hay 1.625 motocicletas eléctricas y 897 ciclomotores eléctricos en Madrid. Las motocicletas registradas después del 1 de julio de 2003 solo pueden ingresar a la ciudad entre las 7:00 y las 22:00. La multa por conducir una bicicleta en la ciudad sin la etiqueta de clasificación ambiental correcta será de 90 euros.

Los problemas para el uso de motocicletas y ciclomotores en Madrid no se limitará al nuevo régimen ambiental: según las nuevas normas, el estacionamiento de motocicletas en las aceras estará restringido. Sin embargo, Madrid tiene 350.164 motocicletas y 94.113 ciclomotores registrados, y solo 6.500 plazas de estacionamiento dedicadas para motocicletas.

Aproximadamente tres cuartos de millón de personas viajan diariamente a la ciudad para trabajar; aproximadamente 32.250 de estos pasajeros usan una motocicleta u otro vehículo de dos ruedas para ir al trabajo o la escuela. Si estos pasajeros cambiaran a un automóvil o al transporte público, la congestión (y, por lo tanto, la contaminación) se volvería mucho peor.

Las motocicletas deben estar exentas de cualquier medida debido a los beneficios que aportan para aliviar la congestión en la ciudad. Los motociclistas no se quedan quietos en los atascos de tráfico y los motociclistas no van en busca de un lugar de estacionamiento. Las autoridades de Madrid se centran en el peatón, los ciclistas y el transporte público, omitiendo el hecho de que las motocicletas deberían ser parte de las soluciones de movilidad.

Fuente: FEMA