Según los datos de la DGT en las ciudades se concentra el 55% de todos los motoristas heridos graves, lo que unido a que la moto representa una probabilidad de fallecimiento en accidente de tráfico un 17% superior al de un automóvil, supone un riesgo a vigilar estrechamente.

En el transcurso de 2017 han fallecido 3 motoristas en las calles de Valencia. Los datos son preocupantes ya que en 2016 tan solo se registró un fallecimiento en el área metropolitana.

La última víctima mortal se produjo el 7 de noviembre, cuando la motocicleta chocó con el vehículo que le precedía en el bulevar Sur. Como consecuencia de la colisión la moto quedó partida en dos y el joven se golpeó fuertemente contra la mediana donde perdió la vida.

A parte de los siniestros mortales se han registrado 1.343 accidentes con motocicleta y 392 con ciclomotor implicado. Esto suma 1.735 accidentes, lo que se acerca peligrosamente a los 1.739 siniestros registrados en todo 2016. Es más suponen la cuarta parte del total de siniestros que ascienden a 6.766, incluyendo los de automóviles, furgonetas y demás vehículos que comparten la vía.

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