La tapa del depósito puede permitir la fuga de combustible tanto con el vehículo en movimiento como en parado. Esta llamada a revisión se suma a otra anterior para el mismo modelo, la 219 del 2017, que afectaba a 718 motocicletas en los EE UU.
En los concesionarios oficiales se procederá a la sustitución del cuello del tanque de combustible por otro con un sistema de sellado mejorado, junto con un sensor del nivel de combustible también mejorado.
KTM aconseja no conducir las unidades afectadas hasta ser reparada la incidencia. El problema ha sido comunicado por los propios usuarios al fabricante y ha estado en fase de estudio durante 120 días para proporcionar la mejor solución para el cliente.
De momento no se ha confirmado que dicha incidencia afecte a las unidades importadas en Europa.
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