El plan maestro pasa por convertir a Pamplona en `Ciudad 30´, para calmar el tráfico y convertir la ciudad en peatonal.  La seguridad vial pasa por una estrategia “global y simultánea” que combine acciones sobre infraestructuras, controles, educación vial y normativas.

En Pamplona se han contabilizado 2.558 accidentes y 164 atropellos en 2017, esto supone un crecimiento del 6,5% respecto a 2016. O lo que es lo mismo, volver a las altas cifras de siniestralidad vividas en 2010, cuando se registraron 2.757 siniestros. De las cinco personas fallecidas en accidentes de tráfico en 2017, cuatro eran peatones y uno motorista.

Con los datos de accidentalidad sobre la mano,  la concejala delegada de Seguridad Ciudadana y Convivencia del Ayuntamiento de Pamplona, Itziar Gómez, dice estar preocupada.

“Tenemos que trabajar en medidas para reducir el tráfico en la ciudad y en la normativa para aminorar la velocidad, en la línea de lo que marca el proyecto de Ordenanza de Movilidad que estamos preparando".

Plan de Actuación: El plan de acción del consistorio se basará en cuatro líneas de actuación.

Infraestructuras:

• Pasos de peatones: 3.000 pasos de peatones que serán analizados estadísticamente, y se publicará un catálogo de pasos de peatones seguros para incrementar su implantación.
• Inventario de señalización vertical: se sustituirá la señalización obsoleta o deteriorada.

Medidas de control: Incremento de controles de alcohol, drogas, motocicletas, bicicletas, documentación, etc. También se actualizarán las cámaras de control de tráfico de la ciudad, y el sistema de control central de la Policía Municipal.

Educación Vial: Especialmente en el ámbito escolar, pero también campañas de concienciación dirigidas específicamente a peatones, ciclistas, motoristas, etc.

Seguridad Vial: gestión dentro del ámbito del borrador del PMUS para la pacificación del tráfico.

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