El chasis de metal tiene paneles extraíbles para el fácil acceso a la mecánica. Un diseño inspirado en la aeronáutica que surgió tras la II Guerra Mundial y que dio origen a la mítica Vespa de motor lateral y en 1947 a las Lambretta de motor central.

Al tener el motor situado en posición central proporcionaba mayor equilibrio y reparto de pesos, pero su imagen no era tan atrayente como la redondeada Vespa.

La gama Lambretta 2018 recupera las formas fluidas y el espíritu de aquellas primeras unidades. Por ejemplo cuenta con guardabarros delantero que se puede fijar (Fix Fender) o dejar móvil (Flex Fender), para acompañar el movimiento de la dirección.

Lambretta Special V50 (2.799 €): Homologado como ciclomotor, cuenta con mecánica de cuatro tiempos y 3,5 CV. Las ruedas son de 12” y el asiento es relativamente bajo 770 mm lo que facilita la utilización para los usuarios de menor talla, especialmente para las mujeres.

Lambretta Special V 125 (3.399 €): Ideado para ser conducido con los carnet A1 o B se presenta en la versión Fix y Flex Fender. La mecánica refrigerada por aire proporciona 12,2 CV de potencia.

Lambretta Special V 200 (3.999 €): Cuenta con una mecánica de 169 cc, inyección electrónica y 12,1 CV de potencia. Los frenos de disco delantero y trasero van acompañados de ABS.

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