El resultado indica que ni los relajantes tonos de la música clásica ni la impulsiva música heavy metal ayudan al conductor, la mejor opción para conducir con seguridad de manera suave y controlada es la música popular o música POP.
El estudio realizado por el periodista Tristan Shale-Hester se realizó mediante una prueba de conducción en los mismos simuladores que utilizan los pilotos de carreras, mientras escuchaban: metal, hip-hop, clásica y pop.
Durante la prueba se realizaban una serie de maniobras típicas de la conducción como la aceleración, curvas técnicamente difíciles, zona de velocidad limitada y una parada controlada en la línea de meta.
La primera vuelta de control se realizaba sin música, estableciendo un tiempo de 4 minutos y 34 segundos, que sirvió de referencia para las demás pruebas con banda sonora de fondo,
En el caso del test con heavy metal a todo volumen el piloto promedio tarda 14 segundos más en completar el trazado, con utilización del acelerador de manera desacompasada e irregular. Este tipo de música y su volumen distraía al conductor impidiendo una conducción normal.
Con música clásica la latencia sobre el tiempo promedio fue de 12 segundos. En algunos casos el piloto reducía la velocidad por debajo de la permitida en dicho tramo.
El hip-hop solo retrasaba al periodista un segundo, pero parece que la música le gustaba demasiado porque permaneció conduciendo 20 segundos más de la cuenta tras cruzar la línea de meta.
La prueba con banda sonora más ajustada al silencio fue la que se realizó con música POP. En este caso el retraso fue solo de 2 segundos, con la conducción más suave de todas.
Del estudio se desprende que la música altera nuestra manera de conducir al influir sobre nuestra emotividad de cinco maneras:
- Cambios de humor: puede ayudar a liberar tensiones y aumentar la relajación, evocando recuerdos que generan emociones positivas.
- Activa áreas del cerebro: las de imitación y empatía, por lo que nos vuelve mejores congéneres y lleva a una conducción más considerada con el resto de usuarios de la vía. Un clima de colaboración entre personas que fomenta la compresión.
- Ayuda a expresar sentimientos: lo que se traduce en formas de conducción diferentes.
- Revive recuerdos pasionales: profundos sentimientos y sensaciones que convierten a algunas canciones en parte de nuestra historia personal.
- Conforman nuestra cultura: la música forma parte de la evolución de las civilizaciones y enriquece la cultura humana.
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