La mayor parte de los robos se produce por levantamiento y transporte mediante furgoneta, por lo que es recomendable el anclaje de la motocicleta a algún elemento exterior como un poste, una farola o cualquier otro elemento de mobiliario urbano.

Se estima que cada ocho minutos se realiza un robo de motocicleta en España según datos publicados por el Ministerio del Interior. La mayor parte de dichos vehículos acaban desguazados y vendidos por piezas en el mercado negro. La policía recomienda denunciar la desaparición en la comisaría más cercana, cerciorándose previamente que la moto no se la ha llevado la grúa municipal por estar mal estacionada.

Para evitar los robos se recomienda evitar las calles más apartadas y peor iluminadas. Estacionar cerca de edificios oficiales incrementa la seguridad debido a la mayor presencia policial y de cámaras.

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